Habitación Blair.

Admin

Llegué a casa, tan radiante, que incluso Dorota me preguntó si había visto de nuevo
'Desayuno con diamantes'.
¡Cielo santo! Iba a hacer realidad mi sueño, desde que tenía doce años había soñado
con casarme con Nate Archibald, mi primer amor.
Durante toda la cita con mi madre había estado deseosa de llegar a casa , para poder
encerrarme en mi habitación y soñar despierta...
Así que eso fue lo que hice al llegar. Me acosté en la cama, tumbada en diagonal,
sonriendo como si fuese idiota.
Y en eso estaba cuando recibí un mensaje de Gossip Girl, mi eterna enemiga.
Lo leí todo, pero solo comprendí un párrafo de todo el trozo que había.

'Finalemente, un gran bombazo ha azotado nuestros oídos:
SUENAN CAMPANAS DE BODA!
Parece ser que Nate y Blair van a ¿casarse?
Sin embargo, para darle un poco de emoción a el asunto, Nate ya ha pasado la despedida de soltero con Susan MacGowan, quien parecía la mar de feliz.
Pobre B... ¿Cornuda antes de la boda?
Lo sentimos mucho.'

Sentí cómo en pocos instantes, las mariposas que había sentido se convertian en pesadas
piedras, dolorosas, como solo el amor puede doler.
Me acurruqué sobre mí misma, abrazandome las rodillas.
Queria creer que todo era mentira...Pero ni Gossip Girl se habia equivocado nunca, ni Nate
era precisamente un santo desde el año pasado.
Unas amargas lágrimas recorrian mis mejillas.
¿Cómo podía haberme hecho eso? Justo ahora...Justo ahora que mi felicidad era total, venía
él a romperme la burbuja, a destrozar mis sueños.
¿Por qué?

Admin

Cuando conseguí levantarme, ya era de noche.
Quizás fuese eso lo que me hiciese tener una idea delirante, o quizás
fuesen las horas que me había pasado pensándola.
Me levanté, y tal como iba vestida, salí de mi habitación, para
después salir de mi casa como alma que lleva el diablo.

Admin

Le indiqué el camino todo el tiempo, riendome a veces por las caras que ponía al cruzarse
con estiradas señoras de Upper East Side.

Abrí la puerta, con bastante sigilo para tratarse de las mismísima Blair Waldorf. Dorota ni siquiera
se despertó, y mi madre seguramente estaría en una cena con sus super amigas las cincuentonas
podridas en dinero, que me aburrian soberanamente, pero que eran una buena cosa para posibles
enchufes en mi futuro.

En vez de quedarme en el comedor, por si despertábamos a Dorota ( no queria que le dijese a mi
madre que un chico que no era del UES estaba en casa ), le subí cogido de la mano a mi habitación.

Aún llevaba los zapatos en una mano, así que nada más entrar, los dejé en el suelo.

Cerré la habitación detrás de nosotros para que nadie nos oyese fuera.

- Bien...Ésta es mi habitación - murmuré mirando a mi alrededor, súbitamente tímida.

Entré con Blair en su habitación y la miré de arriba a abajo.

-Vaya, que pasada... - murmuré. Ella no me escuchó.

- Bien...Ésta es mi habitación - dijo ella. Parecía algo más cortada que antes. Yo sin pensarmelo dos veces salté sobre la cama.

-Que comodo es esto! Yo quiero una! - dije tumbado en la cama y moviendome como si estuviera durmiendo. La miré. - ¿Estás mejor, mi reina?

Admin

Sonreí al ver su entusiasmo.

-Mamá hizo que lo trajeran de Italia...-expliqué refiriendome a la cama.- Sí, sí, ya no estoy
tan mareada.

Me tumbé a su lado, y al instante siguiente me sentí mejor. La cabeza a penas me daba ya vueltas.

- Y bien...¿Hace mucho que estás con S? - murmuré con la vista clavada en el techo.

Enarqué una ceja y la miré de reojo.

-Bueno, no llevamos poco tiempo, pero tampoco mucho...Quizá unos meses, no lo sé. Desde que la conocí, supe que tenía que ser mía... - me encogí de hombros. - Así que hice todo lo posible por tenerla... - sonreí. - Lo cierto es que hemos vivido muchas cosas juntos, para el tiempo que llevamos juntos... - me callé. Sabía que ella no quería oír nada de aquello y me sentí mal por contarle lo que le había contado...Suspiré. - ¿Y qué pasa con la reina del UES? ¿Todos los principes le salen ranas? Si me lo pides buscaré a tu hombre perfecto...- le guiñé un ojo esperando que me mostrara una sonrisa y volví a mirar el techo.

Admin

Sonreí involuntariamente. Al menos una de las dos era feliz.
¿Eso lo acababa de pensar yo? ¿Qué me pasaba? Me estaba volviendo una blanda.
Bah...qué más daba.

-Todos los príncipes acaban conviertiéndose en sapos, Nick.

La miré de reojo. Me puse tenso y me levanté de la cama.

-Creo que tienes razón... - estaba de espaldas a ella mirando al suelo. - Yo...No debería estar aquí. Y mirame. En la cama de la ex mejor amiga de mi novia...Creo que soy el sapo más grande de esta ciudad... - me encogí de hombros y la miré. - Creo que debería irme...

Admin

Abrí los ojos como platos.

- ¡Nick!

Me incorporé en la cama, quedando sentada.

- Yo..yo no quería decir eso...No hemos hecho nada, solo estábamos hablando -dije mientras le miraba
con seriedad.

Dándole la espalda suspiré.

-Si...Hasta ahora...-´me giré y la miré a los ojos. - A los ojos de cualqueir chismoso de esta ciudad estaba en la cama de la "mejor amiga" - hice el egsto de las comillas - de mi novia. Y conociendome no quiero que pase algo de lo que me arrepienta. - mostré una media sonrisa. - Pero, supongo que podemos hablar un rato más...¿Verdad?

Me senté en una esquina de la cama y sonreí.

Admin

Fruncí el ceño.

- Si no quieres quedarte más no pasa nada...-dije levantándome de un salto sin mirarle-Diré a Dorota que te acompañe.

Me gustaría una foto de la habitación de Blair donde tiene el dibujo de una dama antigua con un espejo pero no lo encuentro ayuuda!