Me aburría asi que...

Aquel día np tenía nada que hacer así que al salir de mi suite se me ocurrió hacerle una visita a Bass. Digamos, que me apetecía un poco de diversión.
Así que llegué hasta su puerta y llamé, esperando a que me abriese. Me imaginé que a Chuck le gustaría verme, ya sabía que conmigo la diversión estaba asegurada.

Abrí la puerta atento a una llamada. Supuse que sería el servicio de habitaciones, ultimamente estaban bastante pesaditos conmigo, me dispuse a pedirles "amablemente" que se pirasen cuando mis ojos cayeron nada mas y nada menos que en un cuerpo ya conocído para mi. Alcé la vista y sonreí pícaramente al reconocer por completo a aquella chica morena.
-Brooke Davis -Fingí sorpresa - ¿Qué puedo hacer por ti?

Sonreí, pícaramente cuando fingió sorpresa.
- Uhm... no lo se. Dime qué opinas, ¿Qué puede querer la reina de la diversión haciéndole una visita al rey de la diversión? - seguí sonriendo, con ese toque malicioso en mi mirada.
Le dije, dejando claras mis intenciones, si no eran ya obvias, ya que Chuck sabía que yo no me andaba con rodeos. Mientras le decía aquello me iba acercando a él, quedando a apenas a unos centímetros de distancia, esperando su respuesta.

-El reino tendrá que esperar -Dije mientras le agarraba por la cintura.
Cerré la puerta cuando ella estaba dentro. Acaricié su pelo, era sueve... Al tiempo que le daba pequeños besos en el cuelo.
-Y dime ¿Qué habías pensado para la diversión de dos personas tan importantes como nosotros, B?

Me reí ligeramente cuando me agarró por la cintura y me empezó a dar besos por el cuello. Después le miré con un toque malévolo y una sonrisa traviesa. Dejé mi bolso en el suelo.
- Se me ocurren muchas cosas divertidas - le dije, mirándole fijamente mientras me mordía el labio inferior, en un gesto muy sexy, y a tan solo unos centímetros de él. Entonces rodeé su cuello con mis manos y salté, rodeando su cintura con mis piernas, y él me sujetó sin dejar espacio entre nosotros. Desde allí me quité fácilmente la camiseta que llevaba, dejando a la vista un sujetador de lencería negro. De esos que los chicos se mueren por ver puestos en chicas como yo, o más bien que se mueren por quitarlos... Empezando a notar algo de calor en la hatación le miré. Ahora nuestros rostros estaban a la misma altura, ya que yo era algo bajita.
- Primero podrías empezar por llevarme... - mientras decía esto mis labios se acercaban a los suyos pero todavía no llegaban a rozarse - ... hasta tu cama... - ahora sí que se rozaban - ... y a ver que pasa - finalicé, con una sonrisa y a continuación un intenso beso en el que tan solo había deseo y placer.

Ambos sabíamos perfectamente loq ue iba a pasar. Para eso había acudido a mi, y por eso yo la había recibido con los brazos abiertos...
La llevé hasta la cama como sugirió y me puse sobre ella, comencé a palpar su cuerpo y a quitarle el pantalón. Yo mismo me desabroché la camisa casi arrancándo los botones.
Despues llevé mi boca hasta su oido y susurré:
-Creo que estoy empezando a divertirme...
Y comencé a morderle suavemente la oreja

Sonreí cuando comenzó a llevarme hasta su cama y una vez allí le quité la camisa que él ya se había desabrochado. Cuando me susurró al oído sonreí y me puse sobre él. Le besé por el cuelló me acerqué a su oído, susurrando
- No es para menos, somos los reyes de la diversión
Le mordí suavemente la oreja y después empecé a bajar dandole besos por el pecho sin dejar ni un milímetro de espacio entre nosotros. Mi respiración comezaba agitando así que le desabroché los pantalones y comencé a quitárselos casi con desesperación.
Volví a subir buscuando sus labios, los cuales besé con intensidad, mientras sentía como sus manos recorrían cada centímetro de mi piel, y cómo las mías recorrían su cuerpo.

"Los reyes de la diversión" Ni yo mismo lo hubiese dicho mejor...
Cuando todo hubo acabado me la quedé mirando. Era muy guapa, quizás más que la mayoría que habían pisado mi suite.
-Debes estar muy aburrida para dejarte caer por aqui... -Comenté
Me puse la camisa, pero no la abroché, y me revolví el pelo aún más de loq ue ya estaba

Despues de que todo ocurriese, igual de genial que la vez anterior, se quedó mirándome, asi que yo le miré a él. Sonreí ante su comentario
- Tanto como muy aburrida no, pero digamos que me apetecía divertirme. Y en cuanto pensé en la palabra "diversión" tu nombre cruzó mi mente.
No me había molestado en vestirme de nuevo. Estaba boca abajo, pero ligeramente incorporada, y con la sábana cubriéndome solo hasta la cintura por lo que toda mi espalda estaba al aire
- Y supongo que mi visita te habrá alegrado el día ¿no? - sonreí, divertida, ya que la alegría la había notado bastante.

Me quedé mirando su cuerpo desnudo de cintura para arriba, sonriendte.
-Si, me has alegrado el día. Sin ti estaría condenadoa pasar un dia aburrido y normal. Gracias
Me pasé el dedo índice por los labios de forma pensativa.
-Hace tiempo que no sé nada de ti, B. ¿Algo nuevo?

- Pues la verdad es que hay pocas novedades, días de compras, noches de fiesta y poco ir a clase... Lo de siempre - sonreí y me quedé mirándole, con un toque en la mirada que dejaba claro que algo estaba rondando mi cabeza.
- Se me ocurre algo que podría ser divertido - le dije, sonriendo pícaramente. Esas visitas a Chuck eran realmente divertidas.

-Soy todo oidos, "reina de la diversión" -Dije con un griño
Me estaba tomando con demasiada libertad eso de no ir a clase, pero ¿Qué más da unos dás más? No era momento para pensar en responsabilidades...
Me la quedé mirando de nuevo, sin poder apartar la vista.

Me acerqué a él justo para rozar mis labios con los suyos, sonriendo
- Hace mucho calor en tu suite ¿Sabes? Creo que me vendría bien una ducha
Sonreí divertida, y después me acerqué a su oído y le di un suave mordisco en el lóbulo de la oreja, después de eso le susurré
- De hecho, creo que nos vendría bien una ducha - dije poniendo especial énfasis en el "nos"
Acto seguido, sin darle tiempo a decir nada, salí de la cama completamente desnuda y fui directa al baño. Justo al llegar a la puerta miré hacia él y le guiñé un ojo, sonriendo. Después entré dentro, y abrí el grifo de la ducha, esperando a que viniese. Ese plan me parecía verdaderamente divertido.

No había sentído el calor hasta que me propuso la ducha... Pero estaba realmente "caliente" el asunto. Cuando su silueta desapareció tras la puerta del baño me levanté y la seguí al tiempo que me quitaba la camisa y la arrojaba al suelo.
Oí el sonido de la ducha, me estaba volviendo loco ¡Quería más!

Entró en el baño tras de mi y sonreí. Esto iba a ser realmente divertido. Me acerqué a él y pasé mis brazos por su cuello, pegándome por completo a él. Acerqué mis labios a los suyos y me detuve cuando apenas los estaba rozando
- Divertido ¿eh?
Murmuré, sonriendo y después besandole con intensidad mientras entrábamos en la ducha.

-Muy divertido -Asentí
Lo cierto es que con brooke davis todo podía ser diversión. No pude evitar preguntarme si tras aquella faceta de chica mala sin sentimiento alguno habría aunque solo fuera uno escondido, para que nadie pudiera romperlo...
De todos modos no era algo que me importase realmente, con la diversión bastaba. Y tratandose de Brooke hasta sobraba.
Entramos en la ducha y le acaricié el pelo mojado, apartándoselo de la cara, entonces la volví a besar

El agua caía sobre nosotros mientras nos besabamos. Esa sensación estaba muy bien. Con Chuck Bass todo era diversión. En ese sentido eramos muy parecidos.
Enredé mis manos en su pelo mojado y apoyé mi espalda contra la pared y le atraje hacia mi, sin que quedase separación alguna entre nosotros.
Al estar contra la pared de la ducha me agarré a él y rodeé su cintura con mis piernas, mientras le seguía besando.

Me estaba volviendo completamente loco. Cuando nuestros cuerpos se fundieron entre el agua de la ducha quise que no el mundo se parase en ese mismo instante, no es un momento muy romántico, pero supongo que cada cual tiene su propia definición de romanticismo. La mia era "sexo" aunque he de admitir que esa es mi definición para casi todo.
Salí antes que ella de la ducha, me senté en el sofá frente a la televisión y me puse la toalla por encima. Recordé momentáneamente toda la atrde desde que vino ella... Y mostré una media sonrisa a nadie en particular.
-Puedes venir siempre que te avurras, B -Dije en voz alta

La sensación de estar con Chuck y el agua corriendo entre nosotros no se podía explicar con palabras. Teníamos que repetir esto más veces. Además, los dos teníamos los mismos intereses.
Él salió antes que yo de la ducha, yo me quedé un poco más. Después, cogí una toalla y me la puse alrededor del cuerpo. La toalla no era muy grande por lo que me tapaba lo justito, pero ¿Que mas daba eso ya? Cogí otra toalla y me escurrí un poco el pelo, para no empapar todo a mi paso. Salí fuera y estaba sentado en el sofa, así que me acerqué a él por detrás y le di un suave mordisco en el cuello. Después, me senté a su lado.
- Vendré más veces, eso seguro - sonreí - EL rato que hemos pasado aquí hoy ha sido.... - me detuve, pensando una palabra para resumirlo, y finalmente concluí con una rigera risa - ...muy divertido.

me giré para mirarla a la cara. El pelo le caía mojado sobre os hombros de una manera muy sexy...
-Si... Divertido -Asentí riendo
Después me puse a hacer zapping con el mando. No había nada de interés pero tampoco nada que decir entre nosotros....

Se puso a hacer zapping y yo decidí que ya era hora de vestirme. Habíamos tenido una buena sesión de sexo por hoy y no eramos de los que luego tienen cosas de las que hablar. Aunque eso a mi me gustaba, hacía todo mucho más fácil.
Me levanté del sofá y miré a mi alrededor para ver por donde había ido cayendo mi ropa. La recogí y luego dejé caer la toalla al suelo. Estaba de espaldas al sofá donde estaba Chuck, pero me imaginaba que me estaría mirando mientras me vestía. Yo no era una de esas chicas a las que se puede dejar de mirar fácilmente.
Me fui vistiendo y cuando ya estuve lista volví al sofá.
- Bueno Chuck, creo que yo ya me voy. - Entonces sonreí y me acerqué a él, quedando a tan solo un par de centímetros de su rostro - Pero vendré más veces - Le mordí suavemente el labio inferior y luego me separé. Me levanté del sofá y me dirigí hacia la puerta.

Mientras se había ido vistiendo no pude evitar mirarla, pero puesto que estaba de espaldas a mi supuse que no se dio cuenta. Resulta dificil no mirar a una chica como Brooke davis.
-Te estaré esperando -Dije cuando ya se dirigía hacia la puerta -Encantado de volver a divertirme...

Sonreí después de lo último que dijo. Pero no era la típica sonrisa de chica embobada ante lo que algún chico atractivo le dice, no. Era una sonrisa con un toque malévolo, pensando en los ratos divertidos que vamos a pasar. Una sonrisa con un toque pervertido quizá.
Mi bolso estaba todavía en el suelo, justo delante de la puerta. Así que lo recogí del suelo y salí de allí sin más.
Cualquier otra chica se hubiese girado y le hubiese mirado sonriendo, atontada por lo que había pasado, quizá es lo que yo hubiese hecho hace bastante tiempo. Pero ahora no, yo ya no era esa clase de chica.
Volvería pronto, eso lo tenía claro.